Tras el voto presidencial

Tras el voto presidencial

Por Ramaris Albert/ The Associated Press
Tres entidades estadounidenses se unen al reclamo de Rosselló.

SAN JUAN - Tres organizaciones estadounidenses sin fines de lucro se unieron al reclamo del ex gobernador Pedro Rosselló para que la Organización de Estados Americanos (OEA) celebre una audiencia sobre la necesidad de que se les conceda a los puertorriqueños el voto presidencial.

La petición a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos fue hecha por el Centro de Derechos Civiles de la Universidad de Carolina del Norte, Fair Vote y Nonprofit Voter Engagement Network a través de una carta dirigida al secretario ejecutivo de esa comisión, Santiago Cantón.

“Urgimos a la comisión a actuar rápidamente en aprobar el pedido de una audiencia durante la primera semana de la próxima sesión regular pautada para julio de 2007”, reza la misiva con fecha del pasado 25 de mayo y divulgada el jueves.

“Las próximas elecciones presidenciales, pautadas para el 4 de noviembre de 2008, se acercan rápidamente. Es de vital importancia que los peticionarios puedan expresar sus reclamos en una fecha que permita satisfacer los remedios apropiados en caso de que haya una resolución favorable”, agrega el documento.

La carta fue suscrita por Robert Richie —director ejecutivo de Fair Vote, establecida en 1992—; Anita Earls, directora de Consejería del Centro de Derechos Civiles de la mencionada universidad estadounidense, y George Pillsbury, director del programa de Nonprofit Voter Engagement Network en Boston, Massachusetts.

Las tres entidades destacaron que la participación de Puerto Rico en las elecciones federales es un paso al fortalecimiento de la democracia, por lo que los electores de la Isla merecen estar representados en el gobierno federal.

Al presente, el comisionado residente de Puerto Rico en Washington tiene voz en las comisiones de la Cámara de Representantes federal a la que pertenece, pero no tiene voto.

El año pasado, Rosselló presentó un reclamo ante la Comisión de Derechos Humanos de la OEA indicando que a los puertorriqueños se les violan sus derechos civiles porque no se les permite votar por el presidente de Estados Unidos.